Demi Moore en The Substance
Demi Moore está viviendo un auténtico renacimiento mediático gracias a la película “La Sustancia” (The Substance) (2024). Recientemente ha ganado el premio a la mejor actriz protagonista en los Globos de Oro y en los los Critics Choice Awards. En la gala de estos últimos se acordó de la actriz transexual Karla Sofía Gascón.
Además es firme candidata a ganar un premio de la Academia de Artes y Ciencias de Hollywood.
Por lo tanto te presento esta caricatura pintada con acuarela y lápiz de color de la actriz dentro de la categoría de caricaturas de actores y actrices famosos.
Demetria Gene Moore nació en Nuevo México el 11 de noviembre de 1962. La futura Demi Moore creció en un hogar roto y tuvo problemas con su alcohólica madre además de sufrir el abandono de su padre y suicidio de su padrastro.
En 1979 conoció al músico Freddy Moore, con el que se casaría y del que adoptaría su apellido.
En principio empezó su carrera artística como modelo a los 16 años y posó desnuda para Playboy y Penthouse.
Demi Moore en Ghost
Poco después debuta en el cine (en 1981) y aparece en una serie de comedias para adolescentes. Entre ellas destacan “Lío en Río” (1984) junto a Michael Caine, “St. Elmo, punto de encuentro”, con Emilio Estevez y Rob Lowe y “¿Qué pasó anoche?” (1986). Estas películas la incluían en el llamado “Brat Pack” (Pandilla de Mosocos) de Hollywood.
Paralelamente interpreta un papel fijo en la exitosa serie de televisión “Hospital General”.
En esa época rompe con su marido e inicia una relación de un año con Emilio Estévez. No obstante serían los tiempos de una peligrosa adicción a la cocaína.
Pronto, en 1988, inicia papeles más serios con la película de terror “La séptima profecía”. Después llegaría la comedia “Nunca fuimos ángeles” (1989) junto a Sean Penn y Robert De Niro.
Sin embargo no conseguiría el estrellato hasta la década de los 90 en la que encadenaría una serie de éxitos. Principalmente con “Ghost” (Más allá del amor)(1990) junto a Patrick Swayze y Whoopi Goldberg. Se trataba de una historia romántica de fantasmas.
También aparecerá en “Algunos hombres buenos” (1992) con Jack Nicholson, Kevin Bacon, Kiefer Sutherland y Tom Cruise.
Y no podemos olvidar “Una proposición indecente” (1993), al lado de Woody Harrelson y el maduro Robert Redford. Esta película generó una cierta polémica por el contenido sexual de su trama (un millonaríao que ofrece un millón de dólares por acostarse con la esposa de otro hombre). Otro tanto sucedió con “Acoso” (1994) con Michael Douglas y Donald Sutherland. En este caso interpretaba a una jefa acosadora.
Del Striptease a Bruce Willis
En aquel momento Demi Moore era la estrella femenina mejor pagada de Hollywood. En sus siguientes proyectos tuvo éxitos y fracasos. Interpretó “La letra escarlata” (1995) con Gary Oldman y Robert Duvall. Más tarde haría “Coacción a un jurado” con Alec Baldwin y James Gandolfini.
Pero sus mayores éxitos de esos años serían “Striptease” (1996), con Burt Reynolds y “La teniente O’Neil” (1997) junto a Viggo Mortensen. La primera volvía a ser un drama de contenido erótico y la segunda una reivindicación feminista.
Así mismo participó en una de las peores películas de Woody Allen, “Desmontando a Harry” (1997) (al lado de Robin Williams) y puso la voz al personaje de Esmeralda en la película de animación de Disney “El jorobado de Notre Dame” (1996).
En este momento decidió dar un parón a su carrera para dedicarse a una vida más familiar. Y es que en noviembre de 1987, Demi Moore se volvió a casar. El afortunado era, nada más y nada menos, que el popularísimo actor Bruce Willis. La pareja tuvo 3 hijas: Rumer Willis (1988), Scout LaRue Willis (1991) y Tallulah Belle Willis (1994). Durante el embarazo de Scout, Demi apareció embarazada y desnuda en la revista Vanity Fair envuelta en cierta polémica, para variar.
Demi Moore y Bruce Willis se divorciaron en el 2000 pero siguieron siendo buenos amigos. De hecho, ahora que el actor de 69 años sufre una enfermedad degenerativa (demencia frontotemporal), la actriz se ha convertido en uno de sus principales apoyos.
Los Ángeles de Charlie
Demi volvió con fuerza al cine gracias a “Los ángeles de Charlie: Al límite” en 2003. En esta película protagonizada por Drew Barrymore, Lucy Liu y Cameron Diaz le tocó el papel de villana y demostró seguir en muy buena forma.
Sin embargo las siguientes películas del nuevo milenio apenas tendrían repercusión y generalmente trabajó como actriz secundaria. Se reencontró con Michael Caine en “Un plan brillante” (2007). “Bobby” (2006) le dio la oportunidad de trabajar junto a Anthony Hopkins y Sharon Stone. En “LOL” (2012) coincidiría con la cantante Miley Cyrus.
“Como reinas” (2016) estaba protagonizada por las veteranas Shirley MacLaine y Jessica Lange. Y en “Una noche fuera de control” (2017) la protagonista era Scarlett Johansson.
Nicolas Cage, Pedro Pascal y el español Paco León eran los protagonistas de “El insoportable peso de un talento descomunal” (2022).
De hecho en estos años ha suscitado más interés su vida personal que la profesional. Así es, en 2005 se casó con Ashton Kutcher. La polémica volvía a su vida ya que el actor es 16 años más joven que ella. Se divorciaron en 2011 y en enero de 2012 era ingresada en un hospital por la ingesta abusiva de drogas y alcohol (adicción que, al parecer, le provocó un aborto).
Últimamente también ha participado en algunas series como “Feud” (2024), al lado de Naomi Watts y Diane Lane. O “Landman: Un negocio crudo”, junto a Jon Hamm ese mismo año.
Demi Moore se toma La Sustancia
“La sustancia” de Coralie Fargeat le ha devuelto el protagonismo y la popularidad. Con ella actúan Margaret Qualley y Dennis Quaid. La película es una mezcla de ciencia-ficción, comedia de humor negro más bien gore y denuncia social sobre la dictadura de la juventud y belleza en los medios de comunicación.
No obstante Demi Moore no se visto exenta de esta polémica por sus continuas operaciones de cirugía estética para mantener esa juventud y belleza. Tampoco ha pasado desapercibido que su personaje tenga 50 años de edad cuando ella ya va por los 62. Es decir, que la película no deja de caer en lo que pretende denunciar.
A mí me pareció una película interesante hasta los 20 últimos minutos que, para mí, estaban fuera de lugar.
Esperemos que la buena de Demi gane el Oscar y estaremos atentos al devenir de su carrera en los próximos años.
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